Los vecinos y vecinas de la Plaza del Castillo lo tienen claro:la situación es preocupante. Recuerdan que ante el anuncio en junio de las barras para San Fermín, ya manifestaron su malestar a Navarra Suma:“Un grupo de vecinos y vecinas se dirigió al Ayuntamiento haciéndole saber que no estaba de acuerdo con el nuevo enfoque festivo y que, por favor, reconsiderase el plan”, pero éste “respondió que seguía con el plan y que ya valoraríamos a posteriori el resultado”.

Sin embargo, en el balance  de Sanfermines, “el equipo de gobierno valoró muy positivamente los cambios, opinión no compartida por muchos de los vecinos y vecinas, para los cuales fue un desastre”. Porque “estamos acostumbrados a vivir Sanfermines en el cogollo de la fiesta, pero lo de este año ha superado con creces en aspectos negativos lo de otros años: muchísima más gente, más alcohol, orines por toda la plaza, suciedad y nivel de decibelios insoportable…”.

Añaden que “a tenor de las conversaciones entre el vecindario en la plaza, portales y calles, ese parecía ser nuestro sentir general, que quedó confirmado en una reunión vecinal convocada para hablar del tema”. Acudieron “una treintena de vecinas y vecinos a los locales de Plazara, muchos de ellos en representación de portales enteros, y vimos claramente que el consenso en la valoración negativa de los cambios era total”. 

Reunión con el alcalde Maya

Así se lo transmitieron al alcalde Enrique Maya en la reunión que a posteriori mantuvieron con él. Los residentes le agradecen “que fuéramos escuchados y pudiéramos hacer nuestra valoración de una forma distendida, aún siendo esta diametralmente opuesta a la que hace el Ayuntamiento”, y añaden que “esperamos que de cara al futuro se consideren las aportaciones que ahí trasladamos”. Porque “la valoración pública que en su día hizo el Ayuntamiento centró el éxito en las casi 300.000 personas que acudieron a los DJ’s de la plaza”, mientras que para el vecindario “es ahí donde radica principalmente el problema, ya que la plaza no está preparada para acoger a tanta gente, con todos los problemas que ello acarrea”.

«Antes de Sanfermines, ya nos dirigimos al Ayuntamiento haciéndole saber que no estábamos de acuerdo con el nuevo enfoque festivo»

Citan que “la falta de urinarios públicos unido a las actitudes incívicas que algunas personas muestran –orines, basura, agresiones–, se vieron multiplicadas por la multitud que se concentró”. Además, “la oferta musical programada para este espacio agravó la situación, ya que durante unas horas a la tarde y de 23.00 a las 02.00 los conciertos de DJ’s con decibelios insoportables, las potentes luces y las vibraciones en las ventanas hacían imposible la estancia en nuestras casas”.

«Los conciertos de DJ’s con decibelios insoportables, las potentes luces y las vibraciones en las ventanas hacían imposible la estancia en nuestras casas”

Quieren dejar claro que la iniciativa de Sanfermines en la Plaza del Castillo “no ha sido más que la gota que colma el vaso”, y, como ya recordaron los vecinos en la pasada reunión, es patente “el deterioro de la calidad de vida de los vecinos durante todo el año, sobre todo por la cantidad de personas que vienen a disfrutar del muy abundante servicio de hostelería del Casco Viejo” y añaden:“Ruido, suciedad, orines, altavoces a deshora, abundancia de eventos con decibelios que superan con creces lo aceptable… son un cúmulo de problemas habituales, sobre todo de jueves a domingo, que semana tras semana erosionan nuestra calidad de vida”. Opinan “que muchos de estos problemas serían subsanables con facilidad, imitando el nivel de decibelios en conciertos y eventos”.

“Somos conscientes de dónde vivimos y entendemos lo que conlleva, pero creemos que también tenemos derecho a defender nuestra calidad de vida, la cual se ha visto mermada sustancialmente en los últimos años”, concluyen.